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Una característica muy importante de Dios es su fidelidad. Dios es fiel en todo lo que hace y eso nos da seguridad, porque sabemos que podemos confiar en él. Mira cuán maravillosa es la fidelidad de Dios.
1. Dios es fiel
Él es nuestra Roca, y su obra es perfecta;
todos sus caminos son de justicia.
Es el Dios de la verdad, justo y recto;
en él no hay ninguna maldad.
(Deuteronomio 32:4)
La fidelidad de Dios no falla. Todo lo que Dios hace es justo y bueno, sin errores. Cuando Dios actúa, podemos tener la confianza de que hará lo que es mejor, porque él es fiel.
2. Si Dios lo prometió, ¡él es fiel para cumplir!
Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?
(Números 23:19)
Dios no miente ni se arrepiente. Si Dios lo prometió, él es fiel para cumplirlo. La fidelidad de Dios es firme, verdadera y no depende de las circunstancias para cumplirse. ¡Cuando Dios promete, él lo hace!
3. En Dios tienes protección fiel
Pero el Señor es fiel, y él los fortalecerá y los protegerá del maligno.
(2 Tesalonicenses 3:3)
La fidelidad de Dios garantiza nuestra seguridad. Si amamos a Jesús, tenemos la garantía de que él nos protegerá de la destrucción. El diablo puede intentar llevarnos con él al infierno, pero Dios es fiel y cuida de nosotros.
4. Dios es fiel para perdonar
Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.
(1 Juan 1:9)
Dios también es fiel en su perdón. Cuando pecamos, él nos da la oportunidad de arrepentirnos. Si reconocemos nuestros pecados y los confesamos a Dios, él nos perdona. ¡Y su perdón no falla!
5. ¡El Señor, tu Dios, es fiel!
Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones.
(Deuteronomio 7:9)
Dios es fiel y bondadoso con su pueblo y con todos los que obedecen su Palabra. Cuando obedecemos los mandamientos del Señor, correspondemos a su fidelidad.
6. La fidelidad del Señor nos salva
Bendito sea el Señor, nuestro Dios y Salvador,
que día tras día sobrelleva nuestras cargas. Selah
Nuestro Dios es un Dios que salva;
el Señor Soberano nos libra de la muerte.
(Salmos 68:19-20)
No estás solo, Dios está contigo, llevando todas las cargas por ti. A través de Jesús, él nos ha librado de la muerte y del pecado. ¡La fidelidad de Dios nos salvó!
7. Dios siempre permanecerá fiel
Esta palabra es fiel:
Si morimos con él, también viviremos con él;
Si sufrimos, también reinaremos con él;
Si lo negamos, también él nos negará.
Si somos infieles, él permanece fiel;
Él no puede negarse a sí mismo.(2 Timoteo 2:11-13)
Ninguna persona es perfectamente fiel en todo lo que hace, pero Dios sí lo es. Cuando nosotros no somos fieles, Dios sigue siendo fiel porque él es siempre consistente. Y, si Dios es fiel, sabemos que recibiremos la recompensa que él prometió.
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