Biblia Online ¿Tienes necesidad de ánimo hoy? ¡La Biblia siempre tiene las palabras correctas para mejorar tu día! En la Biblia encuentras esperanza, valor y fuerza para enfrentar cada mañana con alegría y optimismo. Medita en estos versículos y recibirás ánimo y bendición para hoy.
1. ¡Dios te ama!
El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota.
Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!
(Lamentaciones 3:22-23)
El amor y la compasión de Dios no se agotan y él quiere que sientas hoy su amor. El Dios todopoderoso, el Creador lleno de amor y de bondad, está contigo todos los días de tu vida. ¡Hoy no es la excepción! Mantente alerta, a la espera de los pequeños detalles amorosos del Padre para contigo. Él no te defraudará.
2. Puedes sentirte seguro en Dios
Señor, tú eres mi Dios; te exaltaré y alabaré tu nombre porque has hecho maravillas.
Desde tiempos antiguos tus planes son fieles y seguros.
(Isaías 25:1)
Toma un momento hoy para detenerte y mirar atrás. ¡Recuerda todas las cosas buenas que Dios te ha dado! Tu fe se fortalecerá al recordar todas sus bondades para contigo día tras día y año tras año. Dios es fiel, siempre lo ha sido y siempre lo será. No permitas que la ansiedad ante lo desconocido te haga dudar de su fidelidad. ¡En él estás seguro y puedes confiar en él!
3. Dios te cuida 24/7
No permitirá que tu pie resbale; jamás duerme el que te cuida.
(Salmo 121:3)
Dios vigila y cuida de sus hijos las veinticuatro horas de cada uno de los siete días de la semana. Él no duerme, sino que está pendiente de tus pasos para que no resbales y caigas. El camino que Dios tiene para ti es siempre el mejor. Por eso es muy importante que te mantengas agarrado de su mano y le permitas ser tu guía. Confía hoy en su sabiduría, en su amor y en su cuidado.
4. No luchas solo
Bendito sea el Señor, nuestro Dios y Salvador,
que día tras día sobrelleva nuestras cargas. Selah
(Salmo 68:19)
A veces llegan circunstancias difíciles a nuestra vida, situaciones que parecen ser demasiado fuertes para nosotros. ¡No te desanimes ni te agobies! Dios te ayuda a llevar las cargas que son demasiado pesadas para ti. Él está a tu lado, listo para sustentarte y fortalecerte. Entrégale tus problemas a Dios y verás cómo él te ayudará.
5. Entrégale a Dios tus afanes
Encomienda al Señor tus afanes,
y él te sostendrá;
no permitirá que el justo caiga
y quede abatido para siempre.
(Salmo 55:22)
¿Te preocupa algo en este nuevo día? Enfócate en esta Palabra de Dios para hoy. ¡Entrégale esa preocupación al Señor y enfrenta el nuevo día con confianza! Dios está contigo en medio de cualquier situación y puedes contar con su ayuda y su paz para enfrentar este día con tranquilidad. Confía en el poder de Dios y en su cuidado sobre ti.
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6. Dios tiene un futuro para ti
Tú, Señor, eres mi porción y mi copa;
eres tú quien ha afirmado mi suerte.
(Salmo 16:5)
Dios tiene el control de tu vida y él tiene planes buenos para ti. Es por eso que puedes confiar que la porción que él te concede es siempre buena y te acerca a él y a sus propósitos para tu vida. Puede que hoy sea un día difícil, pero Dios tiene bendiciones preparadas para cuando terminen las luchas. No tengas miedo.
7. Recuerda hoy las maravillas del Señor
Muchas son, Señor mi Dios,
las maravillas que tú has hecho.
No es posible enumerar
tus bondades en favor nuestro.
Si quisiera anunciarlas y proclamarlas,
serían más de lo que puedo contar.
(Salmo 40:5)
Toma un momento hoy para recordar las maravillas que Dios ha hecho en tu vida. Recuerda la salvación que él te ha dado, la esperanza de la vida eterna. Piensa también en momentos en los que has visto a Dios obrar de una forma especial en medio de situaciones difíciles. Seguro que has experimentado la bondad de Dios en muchísimas ocasiones. Exprésale hoy al Señor tu gratitud y habla con otros sobre su fidelidad en tu vida.
8. Deja que el Señor te guíe
Confía en el Señor de todo corazón,
y no en tu propia inteligencia.
Reconócelo en todos tus caminos,
y él allanará tus sendas.
(Proverbios 3:5-6)
El Señor te anima en este nuevo día. Pon tu día en las manos del Señor y escucha cómo te guía en todas las tareas que necesitas hacer. Cuenta con el Señor antes de tomar tus decisiones, habla con él y permite que te guíe. Todo irá mejor porque seguirás la dirección de quien desea lo mejor para tu vida.
9. Recuerda que Dios es bueno
Bueno es el Señor;
es refugio en el día de la angustia,
y protector de los que en él confían.
(Nahúm 1:7)
Recuerda hoy todas las veces en las que has recibido la ayuda de Dios. Piensa en los momentos en los que su paz te llenó y te cubrió aún en medio de grandes dificultades. Toma un momento para darle gracias a Dios por sus bondades en tu vida y ten como meta del día fortalecer tu confianza en él.
10. Guarda tu mente
Por último, hermanos, consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que sea excelente o merezca elogio.
(Filipenses 4:8)
Protege hoy tu mente de la negatividad, la queja o el pesimismo. Evalúa todo lo que viene a tu mente conforme a lo que dice este versículo. ¿Es verdadero este pensamiento? ¿Es justo? ¿Puedo pensar en algo amable o digno de admiración?
Piensa hoy en cosas lindas que te acerquen más a Dios y a las demás personas. Llena tu mente de cosas agradables que te ayuden a ver la vida desde una perspectiva más positiva y feliz.
11. Espera en el Señor
Señor, ten compasión de nosotros;
pues en ti esperamos.
Sé nuestra fortaleza cada mañana,
nuestra salvación en tiempo de angustia.
(Isaías 33:2)
Confía hoy en la compasión de Dios, no dudes que él te ama con ternura y que te acompaña en todo momento. Recibe hoy la fortaleza que viene de él y mantente atento a su mover en medio de cada situación que enfrentes. El Señor obrará, la angustia se quedará atrás y podrás sonreír nuevamente.
12. Alégrate, el Señor está contigo
Así que no temas, porque yo estoy contigo;
no te angusties, porque yo soy tu Dios.
Te fortaleceré y te ayudaré;
te sostendré con mi diestra victoriosa.
(Isaías 41:10)
En el día de hoy, decide echar fuera el temor y la angustia. Regocíjate con la certeza de que Dios está contigo, ayudándote y fortaleciéndote. Recibe todas las cosas buenas que él desea darte hoy y aférrate a su mano victoriosa. ¡Vencerás con él!
13. Lucha con confianza
Pelea la buena batalla de la fe; haz tuya la vida eterna, a la que fuiste llamado y por la cual hiciste aquella admirable declaración de fe delante de muchos testigos.
(1 Timoteo 6:12)
La vida cristiana es una batalla, pero recuerda que no enfrentas la lucha espiritual solo. ¡El Señor te acompaña y te capacita! Cada nuevo día dale prioridad a tu relación con el Señor. Aferrándote a él podrás enfrentar cada batalla que se te presente lleno de fe y de la fortaleza espiritual necesaria.
14. Llénate del Espíritu Santo
Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo.
(Romanos 15:13)
Llena tu corazón del Espíritu Santo y de la esperanza que hay en él. Clama por su presencia en tu vida, que sea tu compañía constante y que su esperanza renueve tu corazón cada día. Verás cómo vivirás más alegre y con un corazón más lleno de paz.
15. Alaba al Señor con toda tu alma
Alaba, alma mía, al Señor;
alabe todo mi ser su santo nombre.
Alaba, alma mía, al Señor,
y no olvides ninguno de sus beneficios.
(Salmo 103:1-2)
Toma tiempo hoy para alabar a Dios de todo corazón, sin prisas y sin rutina. Busca su presencia ardientemente y deja que brote de tu corazón una alabanza genuina, alegre y llena de gratitud, porque el Señor te ha colmado de beneficios.
16. Su amor te dará alegría
Sácianos de tu amor por la mañana,
y toda nuestra vida cantaremos de alegría.
(Salmo 90:14)
Dios muestra su amor constantemente a través de pequeños y grandes detalles. No cierres tus ojos ante esa realidad. Mantente hoy alerta reconociendo las repetidas muestras de amor de tu Padre. Tu corazón se llenará de alegría y cantarás cánticos de gratitud al darte cuenta de la gran generosidad que Dios tiene para contigo.
17. Recibe hoy su paz
La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.
(Juan 14:27)
En este nuevo día, Dios te ofrece su paz que abarca todas las facetas de la vida. Abre tus manos, abre tu corazón y recibe hoy esa paz incomparable que Dios te da. Al recibir su paz, tu espíritu se calmará, la angustia se irá y comenzarás a ver las cosas de otra manera, desde el punto de vista eterno.
18. La bondad de Dios es para siempre
Porque solo un instante dura su enojo,
pero toda una vida su bondad.
Si por la noche hay llanto,
por la mañana habrá gritos de alegría.
(Salmo 30:5)
Puede que hoy estés enfrentando diversas luchas. La realidad es que las luchas son parte de la vida, pero puedes tener la seguridad de que Dios no te deja solo en los momentos difíciles. Él te renueva con su presencia amorosa y a través de su Palabra. Alimenta hoy tu fe, busca la cercanía del Señor y recuerda que su bondad para contigo durará por toda la eternidad.
19. Pon tu vida en las manos del Señor
Encomienda al Señor tu camino;
confía en él, y él actuará.
(Salmo 37:5)
Hoy puede ser un día maravilloso si lo encomiendas al Señor. Permite que Dios guíe tus pasos en este día, sigue a Dios con confianza y muévete conforme a su voluntad. Verás cómo él actuará y te guiará por sendas seguras. Sus caminos son siempre mejores, no te arrepentirás.
20. Busca el rostro del Señor
Pero yo en justicia contemplaré tu rostro;
me bastará con verte cuando despierte.
(Salmo 17:15)
En medio del ajoro diario puede que hasta pases días sin tomar tiempo para sentarte a hablar con Dios. Decide hoy buscar su presencia de una forma especial. Hazte el propósito de ir ante el Señor al comienzo de cada día. ¡Será un buen preámbulo para el momento en el que realmente lo verás cara a cara!
21. En Dios, eres vencedor
Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía sino de poder, de amor y de dominio propio.
(2 Timoteo 1:7)
Llénate hoy del Espíritu Santo de Dios y enfrenta este nuevo día lleno de su poder. En Dios estás equipado para hacer frente a lo que traiga el día con optimismo y valentía. Con Dios podrás superar los obstáculos que se te presenten y salir victorioso.
22. Refúgiate en Dios. ¡Él te ayudará!
Dios es nuestro amparo y nuestra fortaleza,
nuestra ayuda segura en momentos de angustia.
Por eso, no temeremos
aunque se desmorone la tierra
y las montañas se hundan en el fondo del mar;
aunque rujan y se encrespen sus aguas,
y ante su furia retiemblen los montes. Selah
(Salmo 46:1-3)
En medio de las circunstancias que tengas que enfrentar hoy, recuerda que Dios está contigo. En él puedes refugiarte y fortalecerte. Dios te cubre con sus brazos poderosos y te ayuda en todo momento. Dios es mucho mayor que cualquier tormenta y en él estás seguro. ¡Refúgiate hoy en él!
23. El Señor renueva tus fuerzas
Aun los jóvenes se cansan, se fatigan,
y los muchachos tropiezan y caen;
pero los que confían en el Señor
renovarán sus fuerzas;
volarán como las águilas:
correrán y no se fatigarán,
caminarán y no se cansarán.
(Isaías 40:30-31)
Todos nos fatigamos y angustiamos cuando luchamos con nuestras propias fuerzas. Acude al Señor en esta mañana, aunque pienses que ya no puedes más. Dios renovará tus fuerzas y te ayudará a seguir adelante. Acude a Dios, aférrate a él, aprende a luchar con su poder y todo cambiará.
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24. Tu ayuda viene del Señor
A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda?
Mi ayuda proviene del Señor, creador del cielo y de la tierra.
(Salmo 121:1-2)
En este día, mira al Señor. Levanta tus ojos y enfócate en él. Para Dios, creador del cielo y de la tierra, no hay problema demasiado grande ni situación demasiado difícil. Él tiene la solución y él te ayudará. ¡Confía!
25. Pon todo en las manos de Dios
Pon en manos del Señor todas tus obras,
y tus proyectos se cumplirán.
(Proverbios 16:3)
No intentes hacer las cosas tú solo lejos de Dios. Pon en las manos del Señor todos tus anhelos, todo aquello que te gustaría realizar en la vida. Dios sabe con toda certeza la mejor forma para que consigas tus metas, y con Dios como tu guía el resultado siempre será de gran bendición. Decide hoy poner todos tus anhelos en las manos de Dios.
26. Haz todo como para el Señor
Y todo lo que hagan, háganlo de buen ánimo como para el Señor y no para los hombres.
(Colosenses 3:23)
Proponte en tu corazón hacer tus tareas en el día de hoy como si fueran un regalo para el Señor. ¡Verás cómo cambia tu forma de ver las cosas! Al hacer todo pensando en agradar a Dios, tu actitud será una más alegre y positiva, y eso traerá alegría y bendición a todos los que te rodean.
27. Proclama el amor de Dios
¡Cuán bueno, Señor, es darte gracias
y entonar, oh Altísimo, salmos a tu nombre;
proclamar tu gran amor por la mañana,
y tu fidelidad por la noche.
(Salmo 92:1-2)
Habla hoy del amor de Dios con los que te rodean. Recuerda las muestras de amor que Dios te ha dado a lo largo de tu vida y comparte alguna experiencia con un amigo o familiar. Una forma muy especial de expresar nuestra gratitud a Dios es compartiendo con otros lo que él ha hecho por nosotros.
28. Dios te escucha
Pero yo clamaré a Dios,
y el Señor me salvará.
Mañana, tarde y noche
clamo angustiado, y él me escucha.
Aunque son muchos los que me combaten,
él me rescata, me salva la vida
en la batalla que se libra contra mí.
(Salmo 55:16-18)
Estés alegre, triste, angustiado o entusiasmado, Dios te escucha cuando clamas a él. Habla hoy con Dios sobre lo que alegra tu corazón y también sobre lo que te angustia. Él es tu mejor amigo, puedes compartir todo con él. No olvides jamás que Dios te escucha y actúa. Él obra en medio de cualquier circunstancia.
29. Vístete adecuadamente
Por lo tanto, pónganse toda la armadura de Dios, para que cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el fin con firmeza.
(Efesios 6:13)
De la misma forma que llevas la ropa física adecuada para enfrentar las inclemencias del tiempo, así mismo prepárate con la armadura de Dios para plantar cara a las tentaciones o dificultades que se presenten durante tu jornada. Cada día ofrece nuevos retos. ¡Prepárate hoy para enfrentarlos y para triunfar en el nombre del Señor!
30. Recuerda que Dios es fiel
Pero el Señor es fiel, y él los fortalecerá y los protegerá del maligno.
(2 Tesalonicenses 3:3)
Dios es poderoso y fiel. Él te guardará del maligno y te fortalecerá para que hagas frente a los desafíos, sufrimientos y persecuciones que lleguen a tu vida. Fortalece tu fe cada día leyendo la Palabra de Dios y llenándote del Espíritu Santo. Anda en obediencia, aférrate a Dios y espera en él. Él te guardará del mal.
31. Confiesa tus faltas al Señor
Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.
(1 Juan 1:9)
¡En Cristo hay perdón! No andes con culpa por tus faltas y pecados. Confiésalos al Padre y recibe su perdón. Dios jamás rechaza al que se acerca a él con humildad. El corazón del Padre celestial es un corazón perdonador. Recibe hoy su perdón y comienza a vivir la vida abundante que él desea para ti.
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