La Biblia es un conjunto de 66 libros, escritos entre los años 1500 – 1400 a.C. y 100 d.C. Está dividida en dos grandes partes: el Antiguo Testamento compuesto por 39 libros y el Nuevo Testamento que reúne 27 libros. Dentro de estas dos partes hay 8 grupos de libros, agrupados según su estilo literario. ¡Tener una Biblia es como tener una biblioteca en tus manos!
El tema central de la Biblia es el amor de Dios por cada uno de los seres humanos y su deseo de tener una relación personal de amistad con ellos. Son muchos los versículos que hablan sobre el amor de Dios y su deseo de que todos reciban el perdón y vivan con él por toda la eternidad. Esa fue la misión de Jesús al venir a la tierra.
Los relatos bíblicos comienzan con la historia de la humanidad desde el mismo momento de la creación. La Biblia termina con un libro profético que contiene la revelación de Dios sobre el fin de los tiempos.
Las partes de la Biblia
La Biblia está dividida en 2 grandes partes llamadas el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento. Aquí, la palabra testamento significa pacto. El término se refiere, primero, al pacto de Dios con el pueblo judío (Antiguo Testamento), y luego, al nuevo pacto gracias a la obra redentora de Jesucristo (Nuevo Testamento).
Antiguo Testamento
1. El Pentateuco
El Pentateuco, del griego pentateuchos, que significa “libro de cinco volúmenes”, está compuesto por los primeros cinco libros de la Biblia. Estos son parte de la Torá, el Libro de la Ley de los judíos. Todos están organizados en orden cronológico. Los nombres de los libros son: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio.
2. Libros históricos
Esta parte consta de 12 libros que cuentan la historia del pueblo de Israel desde la conquista de la Tierra Prometida hasta el exilio babilónico. Los 12 libros también están en orden cronológico: Josué, Jueces, Rut, I y II Samuel, I y II Reyes, I y II Crónicas, Esdras, Nehemías y Ester.
3. Libros poéticos
Son cinco los libros que forman parte de este grupo. Son poemas, textos de sabiduría, proverbios y canciones. Estos están organizados por orden de relevancia y son: Job, Salmos, Proverbios, Eclesiastés, Cantar de los Cantares.
4. Los profetas mayores
Los libros proféticos -17 en total - son escritos de los profetas que hablan sobre el pueblo de Israel. En este grupo hay una subdivisión - profetas mayores y menores - organizados en orden de relevancia. Los profetas mayores incluyen 5 libros: Isaías, Jeremías, Lamentaciones, Ezequiel y Daniel.
5. Profetas menores
En este grupo encontramos 12 libros proféticos. La nomenclatura no significa que un profeta fuera más grande que el otro. De hecho, la definición está relacionada con la extensión de la obra literaria. Los libros de los profetas menores tienen menos capítulos que los libros de los profetas mayores. Los profetas menores son: Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas, Nahum, Habacuc, Sofonías, Hageo, Zacarías y Malaquías.
6. Período intertestamentario (o interbíblico)
Este período se refiere a lo que no fue escrito, es precisamente el espacio de tiempo en el que nada fue profetizado entre el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento. Los "años de silencio" duraron aproximadamente 400 años.
Nuevo Testamento
1. Los evangelios
Los cuatro evangelios relatan el nacimiento, ministerio, muerte, resurrección y ascensión de Jesús. De éstos, 3 evangelios son llamados sinópticos -que tienen la misma visión- pues respetan la misma secuencia de hechos. Sólo el Evangelio de Juan se diferencia de los demás al tener diferencias en varios detalles, énfasis y vocabulario. Hay 4 libros: Mateo, Marcos, Lucas y Juan.
2. La historia de la Iglesia Primitiva
Esta parte consta de un solo libro histórico. El libro aborda la implementación de la Iglesia primitiva después del derramamiento del Espíritu Santo y la expansión del Evangelio. El libro se conoce como los Hechos de los Apóstoles.
3. Las epístolas o cartas apostólicas
Son cartas apostólicas dirigidas a las primeras iglesias difundidas por el mundo antiguo, un total de 21 cartas. Todas las cartas están organizadas cronológicamente, con las primeras 13 cartas escritas por el Apóstol Pablo: Romanos, I y II Corintios, Gálatas, Efesios, Filipenses, Colosenses, I y II Tesalonicenses, I y II Timoteo, Tito y Filemón. Las 8 cartas restantes fueron escritas por otros autores y son: Hebreos, Santiago, I y II Pedro, I, II y III Juan y Judas.
4. Apocalipsis o Revelación
En este caso, solo el libro del Apocalipsis, escrito por Juan el Evangelista, forma parte de esta categoría.
Los 39 libros del Antiguo Testamento
- Génesis
- Éxodo
- Levítico
- Números
- Deuteronomio
- Josué
- Jueces
- Rut
- 1 Samuel
- 2 Samuel
- 1 Reyes
- 2 Reyes
- 1 Crónicas
- 2 Crónicas
- Esdras
- Nehemías
- Ester
- Job
- Los Salmos
- Los Proverbios
- Eclesiastés
- Cantares
- Isaías
- Jeremías
- Lamentaciones
- Ezequiel
- Daniel
- Oseas
- Joel
- Amós
- Abdías
- Jonás
- Miqueas
- Nahúm
- Habacuc
- Sofonías
- Hageo
- Zacarías
- Malaquías
Los 27 libros del Nuevo Testamento
- Mateo
- Marcos
- Lucas
- Juan
- Los Hechos
- Romanos
- 1 Corintios
- 2 Corintios
- Gálatas
- Efesios
- Filipenses
- Colosenses
- 1 Tesalonicenses
- 2 Tesalonicenses
- 1 Timoteo
- 2 Timoteo
- Tito
- Filemón
- Hebreos
- Santiago
- 1 Pedro
- 2 Pedro
- 1 Juan
- 2 Juan
- 3 Juan
- Judas
- El Apocalipsis
Cómo se formó la Biblia
La Biblia, tal como la conocemos hoy, no se formó de un día para otro. Fue escrita en un largo período de tiempo que tomó cerca de 1500 años. Al principio, las historias bíblicas pasaron de una persona a otra por medio de relatos orales. Una persona le narraba a otra las historias sobre lo que había vivido o recibido de Dios, sus experiencias, las de sus antepasados y de los que conocía.
Luego, la gente comenzó a preservar las historias en rollos o pergaminos. Había personas llamadas escribas que se dedicaban a esa labor tan importante. Usaban todo lo que tenían a su disposición: pergamino, papiro, cuero, arcilla... lo importante era preservar la Palabra de Dios para las futuras generaciones.
En cuanto a los idiomas, el Antiguo Testamento fue escrito principalmente en hebreo, pero también en arameo. El Nuevo Testamento, escrito en el siglo 1 d.C., fue escrito en griego. Los autores bíblicos fueron muy diversos. Encontramos entre ellos profetas, reyes, poetas y varios de los discípulos o apóstoles de Jesús.
Como la Biblia fue escrita por más de 40 personas en una franja de tiempo de alrededor de 1500 años, es difícil decir cuántos años tiene la Biblia en sí. Se piensa que el libro más antiguo de la Biblia puede ser el libro de Génesis o el libro de Job y que fue escrito alrededor de 1400 años a.C. Por otro lado, el último libro de la Biblia, el Apocalipsis, fue escrito por el apóstol Juan desde el exilio en la Isla de Patmos, entre el año 90 y 95 d.C.
¿Qué nos cuenta la Biblia?
La Biblia comienza relatando la creación del mundo y de la humanidad, cómo Dios creó de la nada todo lo que hay. Dios creó un jardín precioso en el que colocó al hombre y a la mujer con el deseo de tener amistad con ellos. Sin embargo, los humanos desobedecieron a Dios y el pecado entró al mundo. Dios, en su infinita sabiduría, puso en marcha su plan para rescatar al hombre de su pecado.
Dios escogió a un hombre, Abraham, y le prometió que haría de él una nación grande. La descendencia de Abraham sería de bendición para toda la humanidad. El Antiguo Testamento nos narra la historia de Isaac, el hijo de Abraham y de su nieto Jacob o Israel. La familia creció mucho, y de ahí surgió el pueblo de Israel, el pueblo escogido por Dios.
El resto del Antiguo Testamento nos narra la historia de ese pueblo. Vemos cómo Dios los dirigió y los rescató de la esclavitud en Egipto para llevarlos hasta la tierra prometida. Dios levantó profetas, hombres ungidos con el Espíritu de Dios, para animarlos en momentos específicos, confrontarlos con su pecado y hablarles el mensaje de Dios para ellos.
En medio de todos los problemas que enfrentaba el pueblo de Israel, ellos siempre se aferraban a algo. Tenían la esperanza de que se cumplirían las profecías sobre un líder que los libertaría de los yugos opresores y los ayudaría a vivir en libertad y prosperidad.
Es en el Nuevo Testamento que vemos el cumplimiento de esas profecías y las promesas de Dios. Jesús, el Hijo de Dios, fue enviado al mundo. La vida de Jesús reflejó el poder de Dios para sanar y sobre todo, para salvar y perdonar los pecados. El poder de Dios se manifestó a través de él, porque él era, precisamente, Dios encarnado.
Sin embargo, Jesús fue crucificado. Parecía el final de las esperanzas del pueblo, pero ¡Jesús resucitó! Él venció la muerte. Luego de su resurrección, la iglesia creció mucho y se extendió por diferentes países debido a la persecución y también debido al fervor de los seguidores de Jesús de alcanzar al mundo con su mensaje de salvación.
El último libro de la Biblia, el Apocalipsis, apunta al futuro. Es un libro con mucho simbolismo, pero contiene un mensaje claro. Dios hará un nuevo cielo y una nueva tierra en la que habitarán por toda la eternidad los que aceptaron su regalo de amor y recibieron el perdón de sus pecados por medio de su Hijo Jesucristo.
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