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La frase «no se mueve una hoja de un árbol sin la voluntad de Dios» no es un versículo de la Biblia. Este dicho popular es una interpretación o un resumen de ideas encontradas en escritos antiguos y pasajes bíblicos que hablan del poder y la soberanía de Dios.
Un dato curioso es que esta frase la podemos encontrar casi en su totalidad en el Corán, el libro sagrado de los musulmanes. Mira lo que dice:
“Él posee las llaves de lo oculto, solo Él las conoce. Él sabe lo que hay en la tierra y en el mar. No cae ni una hoja sin que Él lo sepa, no hay grano en las tinieblas de la tierra, no hay nada verde, nada seco, que no esté en una Escritura clara.” (6ª Sura, versículo 59).
Precisamente por el hecho de encontrar la frase en otros libros religiosos, muchos piensas que debe ser parte de la Biblia. La realidad es que, aunque incorpora conceptos bíblicos, la frase exacta no la encontramos en la Santa Biblia.
Nada sucede sin el permiso de Dios
La frase «no se mueve una hoja de un árbol sin la voluntad de Dios» refleja principios fundamentales de la fe cristiana, aunque no está explícitamente en la Biblia.
Esta expresión nos invita a reflexionar sobre la soberanía de Dios sobre todas las cosas. El dicho nos recuerda que cada evento, desde los acontecimientos más importantes hasta los detalles más pequeños de la vida (como el movimiento de una hoja), están bajo el control y permiso del Creador.
En primer lugar, esta frase nos enseña acerca de la confianza en la providencia de Dios. Reconocer que nada ocurre sin el consentimiento de Dios nos anima a depositar nuestra confianza en él en todos los aspectos de la vida. Esto nos libera de la ansiedad y nos da seguridad, sabiendo que Dios está a cargo de todo.
Esta expresión también nos recuerda la importancia de la humildad. Cuando entendemos que no tenemos control absoluto sobre nuestras vidas, estamos más inclinados a someternos a la voluntad de Dios. Esto nos reta a abandonar la arrogancia y reconocer nuestra dependencia total del Señor.
Si aplicamos el fundamento de esta frase de acuerdo con la Palabra de Dios, estaremos reconociendo la soberanía de Dios y viviendo en obediencia a él. ¡Dios es fiel y nada sucede sin su permiso!
Versículos parecidos a la frase que comunican la idea de la soberanía de Dios
A pesar de no citarse directamente en la Biblia, la idea central del dicho «no se mueve una hoja de un árbol sin la voluntad de Dios» se puede encontrar en los siguientes versículos bíblicos:
Pues aun los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis, pues; más valéis vosotros que muchos pajarillos.
(Lucas 12:7)
Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá.
(Lucas 21:18)
Los ojos de Jehová están en todo lugar,
mirando a los malos y a los buenos.
(Proverbios 15:3)
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora:
Tiempo de nacer
y tiempo de morir,
tiempo de plantar
y tiempo de arrancar lo plantado.
(Eclesiastés 3:1-2)
Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
(Hebreos 4:13)
Y sabrán todos los árboles del campo que yo, Jehová,
abatí el árbol elevado y levanté el árbol bajo,
hice secar el árbol verde e hice reverdecer el árbol seco.
Yo, Jehová, lo he dicho, y lo haré.
(Ezequiel 17:24)
Viendo una higuera cerca del camino, se acercó, pero no halló nada en ella, sino hojas solamente, y le dijo: ¡Nunca jamás nazca de ti fruto!
Y al instante la higuera se secó.
(Mateo 21:19)
Entonces Jehová Dios dispuso que una calabacera creciera sobre Jonás para que su sombra le cubriera la cabeza y lo librara de su malestar. Jonás se alegró mucho por la calabacera. Pero, al amanecer del día siguiente, Dios dispuso que un gusano dañara la calabacera, y esta se secó.
(Jonás 4:6-7)
Después dijo Dios: «Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol que dé fruto según su especie, cuya semilla esté en él, sobre la tierra.» Y fue así.
(Génesis 1:11)
Él hace brotar el heno para las bestias
y la hierba para el servicio del hombre,
para sacar el pan de la tierra.
(Salmo 104:14)
La hierba se seca y la flor se marchita,
porque el viento de Jehová sopla en ella.
¡Ciertamente como hierba es el pueblo!
La hierba se seca y se marchita la flor,
mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre.
(Isaías 40:7-8)
Estos versículos muestran que Dios es soberano y controla todo. El dicho «no se mueve una hoja de un árbol sin la voluntad de Dios» es una frase que resume la idea de que Dios lo sabe todo y nada sucede sin su permiso.
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