Marcos 3:25-32
Y, si una familia está dividida contra sí misma, esa familia no puede mantenerse en pie.
Igualmente, si Satanás se levanta contra sí mismo y se divide, no puede mantenerse en pie, sino que ha llegado su fin.
Ahora bien, nadie puede entrar en la casa de alguien fuerte y arrebatarle sus bienes a menos que primero lo ate. Solo entonces podrá robar su casa.
Les aseguro que todos los pecados y blasfemias se les perdonarán a todos por igual,
excepto a quien blasfeme contra el Espíritu Santo. Este no tendrá perdón jamás; es culpable de un pecado eterno».
Es que ellos habían dicho: «Tiene un espíritu maligno».
En eso llegaron la madre y los hermanos de Jesús. Se quedaron afuera y enviaron a alguien a llamarlo,
pues había mucha gente sentada alrededor de él. —Mira, tu madre y tus hermanos están afuera y te buscan —le dijeron.
